

Monster fue el patrocinador que en parte pudo hacer factible que Yamaha Factory siguiera en Moto GP, y aunque su aportación en la época en que nadie gastaba ni un € o $ en patrocinios motociclistas, apostó por la escuadra nipona y financió parte de su presupuesto con 2,5 K de USD. Cantidad que no está a la altura del presupuesto de una marca de fábrica de Moto GP, pero que en época de vacas flacas, era una bendición.
Por ahora todo se está llevando con reuniones entre Monster y Lin Jarvis y Movistar para conseguir que Monster desbloquee su postura y abra la puerta a la entrada de Movistar que lo hará por la puerta grande.
Me sabe mal por Yamaha Factory que no se pueda llegar a un acuerdo o que no aparezca la publicidad de Movistar donde debería...
Pero, a ver si va a ser un castigo divino por poner las carreras en PPV (Pay Per View, o Pago Por Visión).
Un saludo.
Fili
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